Durante el último año, los asientos flexibles en las aulas se han convertido en un tema popular para los docentes. Este término puede ser interpretado de diferentes maneras, pero en el corazón de esta está el concepto de que los estudiantes son capaces de elegir diferentes opciones de asientos que se adapten mejor a su estilo de aprendizaje.
Estas son sólo algunas de las razones por lo que los docentes se están ramificando y experimentando con esta práctica:
Motivación a través de la elección: Los seres humanos están más motivados para completar una tarea cuando tienen una opción (es decir, el control) sobre la tarea. Este no es un nuevo concepto en el comportamiento de los estudiantes -gran parte del formato de disciplina amor y lógica enseña a los adultos a evitar las luchas de poder con los niños al ofrecer opciones. Los docentes pueden adoptar este concepto y ofrecer opciones para proyectos, evaluaciones y otros factores ambientales (música, luces, etc.). Los asientos son sólo otra opción para ayudar a motivar a los estudiantes a tener éxito.
Satisfacer las necesidades de los estudiantes: Más allá de permitir que los estudiantes escojan su asiento, los asientos flexibles de la clase permiten que los estudiantes se sienten o se paren de manera que se adapten mejor a su cuerpo. Algunos estudiantes tienen tendencia a moverse, algunos rebotan, algunos oscilan, y algunos se sientan con la postura perfecta. Los asientos flexibles permiten que los estudiantes se sientan físicamente más cómodos mientras están aprendiendo.
Metacognición estudiantil ("metasitting"): Ahora que los estudiantes tienen sus necesidades físicas satisfechas y están más motivados para aprender, pueden empezar a reflexionar y considerar los diferentes asientos y cómo les gustan. Por ejemplo, la mayoría de los estudiantes saben rápidamente si algo como un T-Taburete funciona para ellos o no. Los docentes pueden usar esta reflexión para profundizar la metacognición de la clase haciendo preguntas como "¿Cómo aprendes mejor?" y "¿Qué factores ambientales te ayudan a aprender mejor?" A medida que los estudiantes de secundaria estudian más en casa, en la biblioteca y en muchos otros lugares, necesitan saber qué funciona para ellos y qué no. Esto les ayuda a tener éxito, tanto en la escuela como en la vida.
Entonces, ¿cómo poner en práctica un plan de asientos flexibles? Estas son algunas ideas para ayudarle a implementar esta práctica en su salón de clases:
- Pelota de ejercicio: Estas pelotas permiten que un estudiante rebote y se mueva, lo que puede ayudar a mantenerlos más enfocados. Sin embargo, estas pelotas grandes no son fáciles de resguardar en un aula, por lo que tener demasiados de estos puede ser complicado. Al observar las opciones de asientos, considere mantener tres o cuatro en un aula para que los estudiantes elijan el que mejor les acomoda.
- T-Taburete: Estos se pueden comprar, pero para aquella persona que tenga conocimiento en carpintería, puede hacer este también, no es difícil. Los T-Taburetes son mucho más rígidos que las pelotas de ejercicio, pero tienen el mismo tipo de efecto que los estudiantes son capaces de equilibrar en ellos con el fin de aumentar el enfoque. Algunos estudiantes realmente encuentran estos divertidos y eficaces, aunque a algunos otros no les gusta en absoluto.
- Escritorio de pie: Uno de mis docentes usó viejos muebles de televisión para esto-ella los alineó en el fondo de la habitación, dando a los estudiantes la opción de estar detrás de ellos para hacer su trabajo. Estos escritorios son simples, eficaces y muy populares entre muchos estudiantes.
- Mesas más bajas: Esta toma un poco más de planificación y espacio, pero el concepto básico es una tabla que se baje para que los estudiantes las usen mientras están sentados en almohadas en el piso. Esto se siente bastante raro al principio, pero puede realmente funcionar para los niños. Los estudiantes son libres de moverse y moverse en el piso, menos distracción – y usted va a hacer lo mismo en un escritorio convencional.
- Taburetes: Debido a que algunos taburetes altos no son muy prácticos con los escritorios regulares, he visto algunas alternativas creativas. Aquellas sillas baratas pueden servir –retire el respaldo, de vuelta a la silla en dirección al taburete. El estudiante tiene que sentarse derecho porque no hay respaldo, y las ruedas permiten que se mueva fácilmente.
- Adaptaciones de escritorio: Hay otras maneras de modificar un escritorio para ayudar a los estudiantes. El cojín wiggle, que imita la sensación de la pelota de ejercicio. Y para aquellos que no quieren sentarse, puede ser posible levantar los escritorios en su aula y utilizarlos como escritorios de pie.
Hay un componente -de la administración del aula- a considerar, por lo que puede ser una buena idea introducir las opciones poco a poco en vez de llevarlos a cabo todos al mismo tiempo. También debe haber un sistema en el lugar para quién los obtiene y cada cuando. Esto podría ser una rotación o un proceso de selección, vale la pena considerarlo y permitir que el estudiante tenga éxito en el aula.
Independientemente de cuántas opciones existan o incluso cuáles, dar esto a los estudiantes son una opción de aumentar el compromiso y la motivación.
Permítanos conocer lo que mejor le ha funcionado o no. Sus mejores prácticas serán de mucha ayuda para
