Esta es la época del año en el que los docentes están encontrando nuevos y diferentes trabajos de enseñanza. Ya sea el primer trabajo como egresados de la universidad o cambio de escuela después de muchos años, el proceso de comenzar algo nuevo puede ser bastante abrumador.
Momento de partir
Dejar ir no es fácil la mayor parte del tiempo. A menos que sea un cambio forzado o una situación terrible, decir adiós puede ser muy emotivo. He cambiado de trabajo varias veces a lo largo de los años, y he aprendido algunos trucos para ayudar a hacer la transición más fácil, tanto para mí como para los que me rodean. Aquí hay algunas cosas a considerar a medida que este proceso avanza:
- Asegúrese de decirle usted mismo a los más cercanos a usted: a menudo utilizamos el correo electrónico como nuestro medio principal para comunicarnos, pero cuando se trata de decirle a su equipo y su director, es más recomendable que se haga en persona.
- Dígales a sus alumnos: Esto puede parecerle una tontería, pero ellos se enterarán sobre esto en algún lugar, que mejor que sea de usted mismo. Después de establecer fuertes conexiones durante el año, es importante honrar esa relación diciéndolas usted mismo, y esto puede resultar mucho más difícil que incluso decirle a los adultos.
- Trate de mantenerlo positivo: Un sabio docente que conocí una vez me dijo que cuando las personas dejan los trabajos, es similar a romper con alguien. A menudo hay emociones conflictivas y la gente a veces puede empeorar las cosas para racionalizar el abandono. La mayoría de las veces, no se dan cuenta de lo que están haciendo. Al salir, trate de ser positivo acerca de la transición. Es de mucha ayuda tener un argumento preparado, como por ejemplo: "Estoy triste por irme, pero realmente emocionado por la nueva oportunidad." Esto evita que las situaciones se vuelvan negativas o incómodas.
- Empezar a empacar: Hablemos de los abrumador! Incluso si solo estuvo un par de años en un salón de clase, es increíble todo lo que se puede acumular. Por favor, no deje cosas atrás "solo en caso de que la persona que ocupe ese lugar los quiera." Confíe en mí, la siguiente persona regularmente no hace esto. Este es el momento de purgar y mover a archivos electrónicos – si es que aún no lo ha hecho. Comience a escanear los documentos que tenga para que no tenga que transportar un montón de archivos de un lado a otro.
- Piense en resguardar en una computadora: Para seguir mi punto anterior, asegúrese de conservar a cualquier cosa importante. Hay muchas opciones para esto- más de una vez, he tenido un docente que no planifica con antelación y pierde una gran cantidad de información valiosa. Los discos duros externos son una gran opción si los archivos pesan mucho, son muy prácticos y útiles. Otra buena opción es el almacenamiento en la nube, pero esto puede ser limitado y un poco engorroso. Creé una nueva cuenta personal de Gmail, comparta todo su respaldo ahí y luego la vuelva a compartirlos a su nueva mi dirección de Google Edu en su nuevo trabajo –es es un buen tip que puede hacer.
Una última opción sería ver si es posible tener computadooras nuevas y viejas al mismo tiempo. De esta manera, puede transferir archivos directamente de una unidad USB y luego conectarlo a la nueva computadora para asegurarse de que no pierda nada. Independientemente del sistema, sólo asegúrese de que hay un plan. Las lecciones de los docentes y las direcciones de correo electrónico abiertas son responsabilidad de los colegios, por lo que regularmente dejan de estar activos muy rápido, prácticamente después de que el empleado se va. - Despídase cordialmente: En mi edificio, tratamos de despedir a los compañeros con una reunión. Una vez más, esto puede ser difícil para las personas, dependiendo de las circunstancias. No participar puede causar malas relaciones con los que no se van. Mantenga una sonrisa y de muchos abrazos. Las escuelas son familias y es difícil ver a los que nos importan seguir adelante, independientemente de la circunstancia.
- Si usted tiene una entrevista de salida, sea honesto: Esto no tiene sentido, pero si usted tiene la oportunidad de ayudar a la escuela a mejorar con su salida, es fundamental ser honesto. Es tentador pensar, "Esto ya no es mi problema", pero si un director o coordinador de recursos humanos está dispuesto a tomarse el tiempo para preguntarle, ellos esperarán una retroalimentación honesta.
Dejar ir puede ser difícil, pero con algunos de estos indicadores, puede ser menos estresante y más positivo para todos los involucrados. En las próximas dos notas se dará continuidad alrededor de este tema, comentaremos cómo empezar en su nueva escuela y construir relaciones positivas.
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