El modelo de disciplina consciente basado en los estados neurológicos de nuestro cerebro que presenta la Dra. Rebeca Bailey, presenta una plataforma para comprender los estados internos del cuerpo y la mente que generan ciertos comportamientos en niños y adultos.
Este modelo, avalado por la secretaría de salud de los Estados Unidos, nos permite ser conscientes de nuestros propios estados, y de esta forma poder gestionar y expresar nuestros pensamientos y emociones de manera funcional.
Sabemos que dentro del aula es de suma importancia que el guía del grupo cuente con habilidades regulatorias a nivel emocional que sean un modelo adecuado para los niños, partiendo desde la premisa de que; en la mayoría de los casos, la estructura y el orden proporcionado por el adulto marcará la pauta para que los alumnos puedan replicar comportamientos funcionales que les permitan resolver problemas, interactuar de manera adecuada con sus compañeros y enfrentarse a situaciones de conflicto de una mejor manera.
El modelo de los estados de la mente o “Brain state model”, está basado en los trabajos de Bruce Perry, Daniel Siegel, y Alexander Luria por mencionar algunos. Y está basado en tres estados de la mente: El estado de supervivencia, el estado emocional y el estado ejecutivo.
Se plantea que el estado de supervivencia responde a la pregunta ¿Estoy a salvo?, y se detona por sensaciones de inseguridad y amenaza, en las que cuando nos sentimos amenazados, las reacciones son: peleo, huyo, me escondo o reacciono de forma física. Este estado se localiza en el tallo cerebral y es observable en niños pasando por un momento de desregulación importante o lo que comúnmente se denomina como “berrinche”. El estado que se genera en el adulto cuando se enfrenta a una situación así con los niños es el mismo. La única forma de desactivar este estado es por medio de generar una sensación de seguridad y tranquilidad.
Por eso, es importante observar las reacciones que se generan en el cuerpo a nivel mental y físico, cuando, como guía de un grupo, nos enfrentamos a una situación de conflicto con uno o varios alumnos. Es esencial desactivar este estado de supervivencia primero en el adulto, para después poder tener una intervención adecuada frente a determinada situación.
A continuación el estado emocional responde a la pregunta ¿Soy amado? Y es la respuesta a cuando se presentan emociones de enojo y de inconformidad hacia alguna situación, la forma de desactivarlo, es por medio de la conexión, el vínculo y la empatía. Este estado se localiza en el sistema límbico y se puede observar en niños o adultos que presentan actitudes como: contestaciones, gritos, mala actitud, reacciones verbales.
Algunas estrategias que pueden servir para el manejo de situaciones de respuesta emocional relacionadas con este estado pueden ser: validar las emociones, reconocer los sentimientos, empatizar y tratar de ayudar a que puedan expresar sus emociones de forma autónoma, evitando frases como “no pasa nada”, “no es para tanto”, “no les des importancia”.
“Como adultos, el estado emocional, nos pone en piloto automático, para que nuestras palabras y actitud sean igual o parecidas a las de figuras principales de autoridad de nuestra infancia”. – Becky Bailey 2015.
Retrocedemos a disciplinar como nos disciplinaron, aun cuando somos conscientes de que esos métodos fueron poco efectivos o dolorosos.
Por último el estado ejecutivo, responde a la pregunta ¿Qué puedo aprender de esto?, es el estado óptimo para la resolución de problemas y el aprendizaje, ya que nos proporciona habilidades prácticas que necesitamos para manejar de manera funcional nuestros pensamientos, emociones y acciones. Logrando poner en práctica esta habilidad para autorregularnos, va a ser posible modelar lo mismo al grupo y así intervenir de manera adecuada con niños que se encuentran en el estado de supervivencia y en el estado emocional evitando en ellos reacciones física o verbalmente agresivas.
De esta forma, una vez logrando seguir este camino para llegar al estado ejecutivo, entonces se pueden poner en práctica habilidades meta cognitivas que nos permitirán guiar a los niños a que aprendan como generaron cierto aprendizaje y a conocer su “huella cognitiva”, es decir, que logren comprender cuales son los pasos para alcanzar el éxito en diferentes tareas y de qué forma gestionaron sus emociones, pensamientos y estados del cuerpo y mente para poder alcanzar el éxito.
Conforme aprendemos a estar conscientemente alertas tendremos a nuestro alcance el poder de tomar decisiones sabias y basadas en el aprendizaje y la práctica de habilidades meta cognitivas, esto nos libera de métodos de crianza aprendidos anteriormente poco asertivos, nos hace empatizar con nuestras propias emociones y las de otros y nos permite mantenernos suficientemente concentrados para poder fijar y alcanzar metas y responder de manera consciente en lugar de reaccionar de manera emocional o instintiva hacia situaciones que se presentan en el día a día.
Bibliografía
https://consciousdiscipline.com/methodology/brain-state-model/#executivestate
Bailey, B. (2008). Edúquelos con amor. México: Prentice Hall.
Contenido proporcionado por Siete Olmedo: Disciplina Consciente